Autora: Alice Sebold
Editorial: Debolsillo
Edición: Marzo, 2010
N° de páginas: 327
Sinopsis:
Cuando conocemos a Susie Salmon, sabemos que ya está en el cielo, en su nuevo hogar. Desde allí nos va a relatar, con la inconfundible voz de una adolescente de catorce años, una historia tan inquietante como alentadora: la de su propio asesinato a manos de un vecino y el proceso de recuperación por el que van a tener que pasar sus seres queridos.
Tras su muerte, Susie contempla cómo la vida continúa sin ella; sus compañeros de colegio rumorean sobre su desaparición, su familia mantiene la ilusión de encontrarla con vida y el asesino se esfuerza en borrar las huellas del crimen.
Los acontecimientos se suceden al tiempo que Susie se va adaptando a ese lugar llamado cielo, un refugio mágico donde encuentra consejeros que la ayudan a entender la muerte y amigos con los que convivir; un nuevo hogar donde halla todo lo que desea excepto lo más importante: reencontrarse con las personas a las que ama y que vive en la Tierra.
Mi opinión del libro.
Nos encontramos con Susie Salmon, una chica corriente de catorce años que ha sido brutalmente asesinada por el señor Harvey, su vecino, luego de haber sido violada.
Al comenzar Susie nos cuenta de inmediato cómo sucedió su muerte y la entrada a su cielo.
Vemos con ella los acontecimientos que suceden en la Tierra: el debilitamiento de la relación de sus padres, la crisis que sufre su madre, la llegada de la abuela alcohólica a la familia, a su pequeño hermano tratando de entender lo que sucedió y su crecimiento, su hermana disfrutando de los momentos y oportunidades que ella no tuvo y las reacciones de sus vecinos y compañeros.
Esto se alterna con descripciones y sucesos ocurridos en su cielo y momentos en los que nos cuenta historias de su pasado. En su cielo también conoce a personajes genuinos.
El principio y el final son maravillosos, pero llegué a aburrirme mucho en ciertos momentos mientras avanzaba la historia. Sentí que había páginas que pudieron haberse omitido para evitar que el libro se hiciese algo pesado, y además, el gancho que te proporciona el principio se pierde mientras avanzas.
La historia es dolorosa. La autora nos acerca al dolor de Susie y de su familia. Yo no lloré con ella, aunque hay gente que sí ha soltado más de una lágrima. Supongo que esto sucede con personas más sensibles.
Dentro de la bola de nieve del escritorio de mi padre había un pingüino
con una bufanda a rayas rojas y blancas. Cuando yo era pequeña, mi padre
me sentaba en sus rodillas y cogía la bola de nieve. La ponía al revés,
dejaba que la nieve se amontonara en la parte superior y le daba rápidamente la vuelta. Los dos contemplábamos cómo caía la nieve poco a poco
alrededor del pingüino. El pingüino estaba solo allí dentro, pensaba yo,
y eso me preocupaba. Cuando se lo comenté a mi padre, dijo: "No te preocupes, Susie; tiene una vida agradable en un mundo perfecto".
Me parece que la ambientación es bastante original y está bien descrita: no todos los días nos narran cómo podría ser el cielo.Hubo momentos en los que me exasperaba, específicamente cuando su padre socializaba con el asesino de su hija. Él no tiene idea de su paradero y la única que sabe la identidad del culpable es Susie, pero cada vez que ella se sentaba a mirar a su padre hablar con el señor Harvey, me daba muchísima rabia porque ella no podía hacer nada.
En conclusión, nos encontramos con una historia original, bonita y conmovedora que nos invita a reflexionar, aunque para mi gusto se hace un poco lenta y aburrida en algunas ocasiones.
Sobre la autora: Alice Sebold.
Nació en California en 1962. Es hija de un profesor de castellano y gran admiradora de la poesía española. Escribe desde que era muy joven y su primera novela, Desde mi cielo, ha recibido encendidos elogios por parte de la crítica y el público. También publicó Lucky (1999), un libro de memorias en el que narra la devastadora experiencia de sobrevivir a una violación. Actualmente compagina su actividad literaria con la colaboración en publicaciones tan prestigiosas como The New York Times y The Chicago Tribute.